Muchas veces no encontramos la forma de tener una buena idea que se pueda convertir en un negocio. Llegar a ese punto de generar una buena idea de negocio no es fácil pero hay una serie de consejos que nos puede ayudar mucho:
- Lo primero de todo, abre tu mente y aparca prejuicios, normas preestablecidas y la típica frase de “las cosas se hacen así porque siempre se hicieron así”.
- Luego, escucha y lee. Escucha a quién tienes alrededor, escucha lo que dicen los clientes de las empresas. Y también lee mucho sobre tendencias de mercados, nuevos negocios y profesiones, nuevas tecnologías y evolución económica y social del país.
- Una vez que tienes mucha información, analiza qué puede ser útil y que puede solucionar un problema concreto.
- Cuando ya tienes identificado un objetivo a conseguir, es decir una idea que soluciona un problema o que aporta utilidad y valor, es el momento de ver cómo conseguimos ese objetivo. Es el momento de la estrategia. Aquí podemos escoger entre varias estrategias:
- Mejorar un producto que ya existe en nuestro mercado.
- Copiar un modelo de negocio que funciona con éxito en otro país.
- Comenta tu idea con otras personas para conseguir comentarios de valor y críticas constructivas. Si puedes, lo ideal es organizar una reunión de tormenta de ideas donde todos los participantes ponen en común soluciones, sugerencias, comentarios, opiniones e ideas en torno a un tema, proyecto o problema.
- Identifica qué tipo de perfil de consumidor pagaría por la solución y/o valor que aporta tu idea. Valora la viabilidad económica y tecnológica de la idea para llevarla a la realidad.
Finalmente, es importante verificar que la idea final que has ido elaborando no existe como tal y que tu idea original es realmente original.